domingo, 24 de febrero de 2013

Al viento



Y en tu ensoñación creíste poder adivinar el futuro siguiendo los renglones torcidos del presente.

Pero fueron mis sueños los que anticiparon tu presencia, y fueron tus miedos los que borraron la sonrisa que yo había saboreado meses antes de que llegases.

Te equivocaste, me equivoqué.

Nos olvidamos del presente, y de que nadie puede leer el futuro en las piedras que el camino pone a nuestros pies.

...y al final comprendí que no tenía sentido hablar al viento, porque al viento le aburren las palabras y siempre le faltan los hechos....siempre, porque el viento siempre quiere más, no lo puede evitar, esa es su condición.

4 comentarios:

  1. Pues si a las palabras se las lleva el viento, no te digo nada al presente... Vuela, es un hecho. De los que quiere el viento. Abrazos.

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  2. Supongo que habrá que afianzar lo que se quiere que perdure en algo más sólido, Torpex.

    Un beso

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  3. Y el viento entendió q se hace lo que se puede ...

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  4. Un buen futuro no puede asentarse sobre renglones torcidos del presente.
    Habrá que cambiar de mensajero, el viento no lo hace bien.
    Besos.

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Gracias por compartir tu presbicia ;-)